La exposición está compuesta por más de 50 piezas, ocho de las cuales han sido sometidas para la ocasión a un proceso de mejora en el Centro de Restauración de la Región. Está formada por esculturas, pero también pinturas, tejidos, planos, mapas, libros y diversos objetos como vasos sagrados. Las obras proceden de museos, iglesias, conventos y colecciones privadas de toda la Región.